Control de alcoholemia

Van dos borrachos en un coche y de repente se encuentran un control de la guardia civil. Como no sabían qué hacer, el copiloto le dice al conductor que le dé 50 euros al agente y así seguro que se salvaban de un multa muy costosa.

El caso es que tras el alto y una conversación de borracho a agente, el agente acepta los 50 euros. Nada más pasar unos 100 metros se encuentran otro control. Y deciden repetir la jugada. El conductor es reticente pero el copiloto le recuerda la denuncia y la multa por conducir borrachos es mucho peor que 100 euros. Así que actúan igual con el agente y vuelven a pasar el control.

Pero 100 metros después encuentran otro control de la guardia civil. Tras maldecir su mala suerte, optan por la solución de los 50 euros. Eso sí, el agente al finalizar la transacción les hace una puntualización:

- Sí me dais otros 50 euros, os digo como salir de la rotonda.


Comentarios

Entradas populares de este blog

El champú

Centro psiquiátrico

El robo en el banco