La atritis
Un borracho de los que huele a alcohol a varios metros de distancia se sube al autobús y se sienta al lado de un cura. En el asiento de delante había un periódico y el borracho lo coge y empieza a leerlo con dificultad debido a su lamentable estado de embriaguez. El cura viendo los excesos del hombre decide rezar y fingir que no está esperando que su convivencia en el asiento no sea muy larga ya que justo al final del trayecto le espera una reunión con el obispo y no quiere causar una mala impresión. De repente el borracho mira al cura y le dice: - Oiga Padre, ¿Puede decirme qué causa la artritis? - La vida alejada de la moderación: mantener relaciones con mujeres diferentes a la propia esposa, los excesos con el tabaco y, en especial, del alcohol; esas borracheras que terminan en noches de lujuria y perversión. - ¡Menuda movida padre! ¡Qué disgusto! El cura al rato, pensando en lo que le dijo al pobre infeliz, se conduele y decide disculparse y le dice en tono comprensivo