La vagina
Cierto día tocan la puerta de la casa de una mujer.
Al abrir se encuentra con un hombre y le dice:
- Disculpe. ¿Usted tiene vagina?
La mujer muy ofendida cierra la puerta disgustada. A la mañana siguiente vuelve el mismo hombre y llama a la puerta y le hace la misma pregunta. Esto sucede otros dos días así que decide contarle la situación a su marido:
-No te preocupes, mañana me quedo en casa todo el día, cuando llame a la puerta, yo me escondo y cuando te lo pregunte le contestas que sí. A ver qué responde, y si quiere algo raro ya salgo yo y le pongo en su sitio.
Al día siguiente el hombre vuelve a llamar a la puerta:
- Disculpe. ¿Usted tiene vagina?
- Sí.
- Excelente! Por favor si no le importa, ¿podría decirle a su marido que deje la de mi mujer y empiece a usar la suyo?
- Disculpe. ¿Usted tiene vagina?
La mujer muy ofendida cierra la puerta disgustada. A la mañana siguiente vuelve el mismo hombre y llama a la puerta y le hace la misma pregunta. Esto sucede otros dos días así que decide contarle la situación a su marido:
-No te preocupes, mañana me quedo en casa todo el día, cuando llame a la puerta, yo me escondo y cuando te lo pregunte le contestas que sí. A ver qué responde, y si quiere algo raro ya salgo yo y le pongo en su sitio.
Al día siguiente el hombre vuelve a llamar a la puerta:
- Disculpe. ¿Usted tiene vagina?
- Sí.
- Excelente! Por favor si no le importa, ¿podría decirle a su marido que deje la de mi mujer y empiece a usar la suyo?
Comentarios
Publicar un comentario