El verdugo

Dos miembros del cartel de la región han secuestrado a un miembro de una banda rival y llevan a su víctima a su cuartel general en medio del campo. Allí hay una finca enorme y en la nada un establo para ganado. Abren la puerta y allí les espera un gigante hombre negro de dos metros de alto y 120 kilos de peso limpiándose las uñas con un cuchillo enorme.

- Aquí te traemos a este. Le tienes que sodomizar para que aprenda con quién está tratando.
- Dejadlo ahí en un rincón que más tarde me encargo de él.

Unas horas después se acerca el negro al hombre que está temblando de miedo y éste pide piedad:
 - Por favor, señor, no me haga eso, después mi vida será una ruina, estará acabada, tenga piedad, por el amor de Dios.
 - ¡Calla y quédate quieto!

Al rato vuelven los otros dos con otro hombre.

- A éste le tienes que cortar las dos manos y sacarle los ojos para que aprenda a no tocar el dinero de que no es suyo.
- Dejadlo ahí que dentro de un rato me encargo.

Una hora después traen otro:

- A éste le cortas la verga y la lengua para que nunca más se meta con las mujeres del patrón.
- Dejadlo ahí en el rincón con los otros.

Finalmente, traen a otro

- Córtalo en pedacitos y le mandas cada pedacito para la familia.
- Con los otros.

Cuando los dos sicarios se van, el primer tipo eleva un poco su voz, pero a poco volumen le dice al verdugo:
- Señor, por favor no se vaya a confundir, recuerde que yo soy el del culo.