El polvo australiano

Llega un mal marido a casa y le dice a su sufrida mujer:
- ¡Prepárate que vamos a echar un polvo australiano!
- ¿Australiano? ¿Y eso cómo demonios se hace?
- Muy fácil: mientras yo me tiro a la canguro, ¡tú das botes por toda la casa!

Comentarios

Entradas populares de este blog

El champú

Centro psiquiátrico

El robo en el banco