Los ancianos en la hamburguesería
Una pareja de ancianos va a un restaurante de comida rápida y piden una hamburguesa y unas patatas para los dos. Dividen al hamburguesa en dos y se disponen a comer. Un señor les ve y siente pena, así que se ofrece a comprarles una segunda hamburguesa.
- No se preocupe, nosotros compartimos todo.
Unos minutos después, el señor se da cuenta de que la esposa no ha probado bocado y se vuelve a ofrecer para comprarle una segunda hamburguesa para que ella coma.
- De verdad no me importa comprarle su propia comida
- No se preocupe, ella comerá su parte. Lo compartimos todo.
Poco convencido, el señor le pregunta a la esposa:
- ¿Por qué no come?
- ¡Porque estoy esperando a que mi esposo me preste la dentadura!
- No se preocupe, nosotros compartimos todo.
Unos minutos después, el señor se da cuenta de que la esposa no ha probado bocado y se vuelve a ofrecer para comprarle una segunda hamburguesa para que ella coma.
- De verdad no me importa comprarle su propia comida
- No se preocupe, ella comerá su parte. Lo compartimos todo.
Poco convencido, el señor le pregunta a la esposa:
- ¿Por qué no come?
- ¡Porque estoy esperando a que mi esposo me preste la dentadura!
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