El sexólogo

Una pareja pide cita con el sexólogo porque llevan un tiempo mal en sus relaciones. El sexólogo les pide desnudarse y que lo hagan en el diván frente a él. Observa minuciosamente el acto y al terminar les dice que todo indica que nada está mal con ellos. 

Tras una semana vuelven a pedir cita con el sexólogo y la historia se repite; vuelve a decirles que todo está bien. Sin embargo, piden cita 5 veces más durante ese mes.

Extrañado, el sexólogo les pregunta que si no tienen ningún problema de verdad, por qué van tanto a su consulta. El hombre le contesta: 

- Verá, ella es una mujer casada y no podemos ir a su casa. Yo también estoy casado, por lo que tampoco podemos ir a la mía. El hotel más cercano de la zona cuesta 60 euros y usted nos cobra 50 por sesión y tengo un seguro que me reembolsa el 50 %.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El champú

Centro psiquiátrico

El robo en el banco